martes, 5 de mayo de 2009

PADRE ALBERTO PIDE PERDON POR ESTAR DE CHULAMBRICO

MIAMI, Florida-El padre Alberto Cutié sumido en un mayúsculo escándalo, podría presentar su renuncia de un momento a otro tras el escándalo de las fotos publicadas por la revista TV Notas USA, en las que aparece en actos comprometedores con una mujer en una playa.Según fuentes citadas por medios de comunicación locales, el sacerdote envió un correo electrónico a otros sacerdotes y a su círculo de amigos en la emisora católica Radio Paz, en el que confiesa haber cometido un error.En la extensa y emotiva nota citada, el cura admite que "no ha sido fácil luchar contra las tentaciones", mientras trata de explicar las fotos tomadas por un paparazzi y vendidas a la revista de farándula, y en las cuales aparece besándose con una elegante mujer en una playa de Miami Beach.El sacerdote, quien ha sido relevado de todas sus funciones dentro de la iglesia Católica tras una reunión el martes con el obispo de Miami, John Favarola, agregó en su carta que "durante mucho tiempo estuvo convencido de que con una buena dosis de oración y de ejercicios, la tentación podría ser fácil de vencer".Sin embargo, el Padre Alberto añade: "quiero que sepan que asumo toda responsabilidad por mis acciones, y le pido perdón a Dios por ellas. Quiero pedir perdón si mis acciones les han causado temor y tristeza. Les aseguro que mis servicios continuarán.", según añade Cutié.El sacerdote en desgracia de la iglesia San Francisco de Sales instó a sus amigos a que amen a la iglesia, a la evangelización, y pidan por él siempre, al recordar la frase del evangelio donde dice que nada podrá separarlo de Dios.El Padre Alberto, tras 22 años de servicio, añade "se que yo actué mal", tras recordar la frase del evangelio donde se señala que no es bueno que el hombre esté sólo. Y confiesa con cierta amargura: "Eso lo he vivido yo en carne propia, y lo he visto en muchos hermanos".En una de las fotos publicadas por la revista, el padre Alberto Cutié aparece introduciendo su mano dentro del bikinis de su acompañante en la parte baja del abdomen en una famosa playa de Miami, entre otras fotos comprometedoras publicadas por el medio de farándula, lo que ha significado un gran bochorno para la iglesia católica.

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