SAN PEDRO DE MACORIS. El economista ecologico petromacorisano David Montesdeoca Fortunato revelo que el lunes pasado la empresa AES se transó por 29 millones de dólares a favor de las familias de Arroyo Barril que le habían interpuesto una demanda por los daños causados por el depósito de cenizas de carbón mineral en esa localidad entre los años 2003 y 2004.
Dijo que la causa se siguió en la Corte de Delaware.
Montesdeoca Fortunato sostuvo que esa victoria judicial de las familias de Arroyo Barril es también una victoria para los ambientalistas y para el recurso de amparo ambiental preventivo que ha sido interpuesto ante el Tribunal Superior Administrativo para que paralice la construcción de las plantas de carbón de Punta Catalina y ordene su conversión a gas natural, precisamente por los daños que causarán a la salud y al medio ambiente de la provincia Peravia.
Afirmo que, a la vez de celebrar esta victoria que de alguna manera pautará el fallo pendiente del Tribunal Superior Electoral del recurso de amparo
hay que estar muy optimistas de que el mismo no podrá ser otro que proteger los derechos a la salud y el disfrute de un medio ambiente limpio de la población de la provincia Peravia, a pesar de la escasa independencia del Poder Judicial y de la alta venalidad prevaleciente entre nuestros jueces.
Acusaron a la multinacional AES Corporation por abandonar en una playa de República Dominicana miles de toneladas de desechos tóxicos que causaron desde abortos hasta malformaciones en niños.
Afirmo que este lunes, los abogados de AES Corporation y cuatro subsidiarias, incluyendo AES Puerto Rico, llegaron a un arreglo económico que dio fin a la batalla legal que vecinos de Arroyo Barril originaron en noviembre de 2009.
“Los términos del acuerdo, sin embargo, no están disponibles, dijo al medio de negocios Bloomberg Kim Cefas, un oficial de la Corte Superior de Delaware. “A veces es más fácil resolver en silencio estas cosas para deshacerse de ellos”, expresó por su parte Charles Fishman, analista de la empresa de investigación de inversiones Morningstar Inc., luego de que trascendiera el arreglo en la corte de Delaware. Las acciones de AES cayeron más de 1.4 por ciento y cerraron en $11.36 en la Bolsa de Nueva York, reseñó Bloomberg.
Expreso que los abogados demandantes reclamaban una indemnización de sobre $29 millones para sus clientes, luego de que sobre 27 mil toneladas de cenizas de carbón descartadas por la planta eléctrica AES en Guayama, Puerto Rico, fueran descargadas en un solar del muelle de Arroyo Barril, a la intemperie, a pasos de la playa y sin medidas de control.
Añadio que las montañas del material gris levantadas junto a viviendas de la comunidad entre los meses de octubre de 2003 y abril de 2004, permanecieron abandonadas hasta el otoño de 2007.
Un análisis realizado por el Instituto de Química de la Universidad Autónoma de Santo Domingo certificó que los desechos estaban cargados de metales pesados. En específico, hallaron arsénico, berilio, vanadio y cadmio “muy por encima de los niveles establecidos por los estándares internacionales”, concluyó la Comisión Ambiental de la Academia de Ciencias de la República Dominicana.
Sin embargo, los padres demandantes sostienen que presuntos representantes de AES y funcionarios dominicanos los engañaron al asegurar que las cenizas de carbón no eran tóxicas y que “podían ser provechosamente utilizadas por los residentes de Samaná como material de construcción”. Así se desprende del expediente del caso.
Montesdeoca Fortunato indico que el juicio contra la multinacional había sido citado para las 9:30 de la mañana del 4 de abril, en la sala de la juez presidente Jane R. Jurden.
No hay comentarios:
Publicar un comentario