MUEREN CUATRO EN LA ROMANA

LA ROMANA. “Yo quiero, por Dios, que se haga justicia, porque si no, no voy a poder seguir viviendo”, expresó entre lágrimas Armando Ortiz, a quien desconocidos le habrían incendiado su vivienda y murieron dos de sus hijos, un sobrino y su bisabuela.

La tragedia, que ocurrió en la madrugada de ayer, ha consternado a esta población, sobre todo a los moradores del sector donde ocurrió.
Vecinos y el propio Ortiz, más conocido como El Siervo, creen que la familia de este dirigente comunitario fue víctima de antisociales que en los últimos meses han sido denunciados por éste por la comisión de atracos, robos y venta de drogas en el sector Katanga, donde se produjo la tragedia.
Los fallecidos son Freiser Ortiz, de 8 años; las hermanitas Katty Elizabeth y Laura Elizabeht Ortiz, de 11 y 4 años, respectivamente, así como la anciana Jacoba Alemán García, de 98 años, tatarabuela de los pequeños.
Entre sollozos, Armando Ortiz narró que alrededor a las 2:00 de la madrugada escuchó abrir una de las ventanas y que lanzaron un artefacto que cubrió inmediatamente en llamas la humilde casita de madera y zinc, ubicada en un segundo nivel. La parte baja es de concreto.
Dijo que mientras los niños dormían con la anciana, sus otros dos hijos pequeños, Armando y Marisol, estaban junto a su esposa Wendy Mejía y él en la vivienda de abajo, razón por la que pudieron sobrevivir.
Explicó que salió rápidamente, pero los escalones que dan acceso a la casa siniestrada estaban bloqueados. Entonces, salió por la parte de atrás y desde allí divisó a su hija Katty, parada en la ventana.
Le pidió que se lanzara, pero la niña se negó diciéndole que “aquí está mi hermanita Laura”. Y añadió: “Ella estaba desesperada frente a la ventana, y me dijo que no, que no iba a dejar a su hermanita”, señaló Armando Ortiz.
El desconsolado padre lamentó que hacia la 1:00 de la madrugada Laurita se le había quedado dormida y decidió llevarla arriba. “Yo no sabía que estaba entregando mi hija a la muerte al subir las escaleras”, expresó.Cree fue Intencional. Armando Ortiz aseguró que en el hecho actuaron manos criminales. Eso lo basa en que ha recibido amenazas de vándalos vinculados a la delincuencia y la venta y consumo de drogas en el empobrecido sector.

La Policía interroga a tres personas y se espera que este lunes ofrecera ofrezca detalles a la prensa, reveló a El Caribe uno de los investigadores.

Manifestación de solidaridad

Decenas de personas asistieron ayer al velatorio y y sepultura de los tres niños y la anciana. Sus familiares recibieron la solidaridad de diferentes sectores de La Romana, sobre todo de la comunidad donde ocurrió esta tragedia.

Pastor denuncia delincuencia y drogas afectan sector

El sector Katanga, ubicado en la parte este de La Romana, “está siendo inundado por las drogas”, denunció el pastor evangélico Manuel de Jesús Silvestre, de la Iglesia Apostólica El Maestro.

Llamó a combatir la delincuencia y la drogadicción haciendo un trabajo eficiente y colaborando con niñez, para que no crezca con una mentalidad corrompida.
Asimismo, Pedro Pérez (Álex) dijo que su sector es vigilado frecuentemente por las autoridades, pero que la delincuencia es un problema complejo. Sostuvo que no hay garantías.

“Denunciando directamente uno como persona, a veces corre peligro. Yo lo hice en el pasado, pero ahora no, porque no hay protección para las personas”, señaló Pérez.
De su lado, Clemente Ortiz reclamó justicia porque, según alega, la tragedia fue intencional. También, hizo hincapié en que en Katanga abundan las actividades delictivas, lo cual había sido denunciado por su hermano en los medios informativos.

Clemente, padre del niño Freiser Ortiz, explica que cuando se produjo el incendio estaba laborando en Costasur Dominicana, donde se desempeña como vigilante privado.
Los fallecidos fueron velados en la Funeraria Romana y a las 4:00 de la tarde sepultados en el Cementerio Nuevo, ubicado en la carretera que comunica a La Romana con Higüeral.