domingo, 28 de noviembre de 2010

El fantasma y el desayuno escolar

Por: Lic. Héctor Ramírez Sosa
Recordemos que en la penúltima ocasión el fantasma se convirtió en el fucú para la india Alejandrina. Esta tuvo que enfrentársele con ferocidad ya que se estaba chupando la “calidad del desayuno escolar”. En este pleito, la india perdió su “varita mágica” y “su poder”. Fue derrotada y recibió el castigo del Jefe Indio.


Ahora, el fantasma nuevamente ha vuelto con más violencia a atacar. Ha infectado la leche del desayuno escolar con bacterias malignas, provocando intoxicaciones y pánico en los(as) pobres alumnos(as) de las escuelas de la tribu. Por tal motivo muchos temen ingerirlo y prefieren quedarse “jalando aire” en vez de poner sus vidas en peligro.

El cacique Melanio, designado por el Jefe Indio, ante la situación alarmante decide investigar y descubre la identidad del fantasma, dice llamarse “Sabotaje”. De inmediato, se artilla a lo indio, con su hacha en mano, e inicia su búsqueda por todas las escuelas de la tribu. Pero, esta resulta infructuosa. El fantasma lo tiene “al coger el monte”.

El Jefe Indio, su Consejo y Melanio se reúnen y deciden suspender el desayuno escolar para salvaguardarlo del fantasma “Sabotaje”, en detrimento de los(as) niños(as) que hoy no cuentan con el mismo. Mientras el hacha del cacique va y viene en el bohío se ahorran diariamente varios milloncitos y siguen planificando, con pipas, bebidas y manjares, como atrapar al malvado fantasma.









A este intento de fábula búsquele la moraleja o las repuestas a estas interrogantes: ¿Hasta cuándo seguirán los(as) niños(as) “jalando aire” o “comiendo pan a seca”? ¿Qué harán en el bohío con alrededor de 17 milloncitos que diariamente se ahorran? ¿Atraparan al fantasma o seguirá haciendo de la suya? ¿Reintegraran pronto y total el desayuno escolar con probada calidad?


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