El evangelista Hernández regresaba de Santo Domingo a eso de las 4:00 de la tarde en una camioneta Toyota Hailux conducida por el también evangelista Milton Felipito, en momentos que llovía deslizándose el vehículo en la avenida Las Américas.
Tanto Hernández como Felipito no presentan ningún golpe, pese a que el vehículo quedo totalmente destruido luego de dar varias vueltas destrozando arboles.
El pastor Hernández dijo que al momento del accidente venia leyendo la Biblia y que cuándo el vehículo se deslizo y comenzó a dar vueltas él clamaba a Dios y que de repente se apareció una luz que brillaba en forma de remolino dentro del vehículo.
Varios conductores y personas del lugar se presentaron de inmediato diciendo que estaba muertas las dos personas que iban en la camioneta, pero el evangelista Hernández salió con la Biblia en la mano diciendo mi Cristo vive y yo también estoy vivo.
El líder religioso manifestó que el Señor Jesucristo los protegió y que seguirá llevando a cabo los acostumbrados operativos médicos, de entrega de ropa, cama, electrodomésticos y comida en barrios y comunidades de San Pedro de Macorís y otras provincias del Este.
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