sidente de la Cámara de Comercio y Producción de Santiago, Sr. Ricardo Fondeur V. consideró que el extenso discurso del Presidente de la República, Doctor Leonel Fernández Reyna, ante la Asamblea Nacional en ocasión de la toma de posesión del nuevo Gobierno, es una evidencia de la ampliación de los espacios democráticos en el país, así como de la mayor participación de los diferentes segmentos de la población en procura de impulsar soluciones a los problemas nacionales.También consideró oportuno destacar la nutrida participación de Dignatarios internacionales, lo que confirma la inclusión de la República Dominicana en un radio de influencia mayor en el ámbito mundial.
Estos elementos confirman la afirmación del Presidente Fernández respecto a que fue el pueblo dominicano el gran ganador de la pasada contienda electoral y que será este mismo el que se mantendrá activamente participativo y vigilante, a fin de que las acciones que lleve a cabo el nuevo Gobierno que hoy inicia su gestión, estén encaminadas a mejorar su calidad de vida y a solucionar los problemas que nos aquejan.
El reconocimiento de la necesidad de mostrar indicadores y metas en el ámbito internacional que sean congruentes con nuestras aspiraciones en materia de captación de inversión extranjera y conquista de nuevos mercados de exportación es un elemento importante para esta nueva gestión. En tal sentido, el establecimiento de un acuerdo de vigilancia con el Fondo Monetario Internacional constituye un elemento clave a estos fines.
Es también necesario destacar el compromiso asumido respecto a las metas macroeconómicas para el presente cuatrienio. Las mismas sientan las bases para la consolidación del ambiente de confianza de los agentes económicos nacionales e internacionales sobre nuestro desempeño presente y futuro.
Merece igual mención el enfoque sobre el sector agropecuario, vía para garantizar nuestra alimentación y para crear empleos que permitan mejorar la calidad de vida a las clases más necesitadas que habitan precisamente en la zona rural. De igual forma, el apoyo al crédito de las mypimes constituye un auspicioso elemento que incidirá positivamente en la capacidad de generar nuevos empleos de nuestra economía.
Para el sector empresarial, el tema eléctrico constituye un factor neurálgico que ha perturbado nuestro avance hacia una nación desarrollada durante décadas. La conciencia mostrada por el mandatario en este ámbito es auspiciosa a fin de que el Gobierno que se inicia, dedique los esfuerzos necesarios para dejar definitivamente resuelta esta gravosa situación. Nos alientan las señales en materia de reconversión de plantas de generación eléctrica hacia el uso de gas natural, de mayor aprovechamiento de la energía hidráulica y del potencial inicio del aprovechamiento de la energía eólica. El anuncio de un posible apoyo de Colombia con el suministro de energía es un buen augurio a la posibilidad de recomponer nuestra canasta de combustibles y oferentes en un mercado que no ha estado caracterizado precisamente por la libre competencia.
En materia de salud, pasar de la labor curativa a la labor preventiva, impone grandes retos al sector, pero a la vez redundará en una importante contribución a elevar la calidad de vida de la población.
La gigante agenda de construcción de obras de infraestructura presentada por el Presidente Fernández en su discurso, impresiona tanto por la diversidad de las mismas como por el número de proyectos. De primera impresión nos parece que una de cada dos obras anunciadas por el Presidente están destinadas a ser construidas en la capital, donde vive un tercio de la población. De ser esto así, se plantea un desequilibrio en la aplicación de los recursos de inversión pública que perjudicaría el desarrollo integral del país en todo el territorio nacional.
Ha sido un clamor de la sociedad la ampliación de la atención en materia de educación. La visión del Presidente sobre el papel de la juventud en la revolución social y empresarial del país nos anima a esperar que su compromiso con la renovación curricular, el apoyo a la educación técnico vocacional y la elevación de la calidad de la educación básica, contará con las energías necesarias para vencer los obstáculos que encontrará en el camino este necesario proceso de transformación.
Nos pareció justo y necesaria la mención y el compromiso asumido por el Presidente en materia de lucha contra la corrupción, pues es este flagelo un fuerte dique al logro de la equidad social que consume nuestros escasos recursos y lacera el alcance de las políticas públicas. Este mensaje junto a la declarada guerra contra el narcotráfico y las drogas, merece el respaldo de todo el pueblo dominicano.
La planteada reforma a la ley de partidos, a la ley electoral y la reforma a la Constitución, son en conjunto la discusión que habremos de llevar a cabo para establecer la ampliación de los espacios democráticos, la consolidación del sistema, así como la preparación de nuestra nación para que pueda interactuar con mayores niveles de protección en el ámbito internacional y mayores niveles de transparencia en materia de partidos políticos. La dimensión de estas reformas implica un fuerte compromiso de todos los actores sociales que esperamos sea asumida con la conciencia necesaria para demostrar al mundo nuestros avances en esta materia. Es por tanto este un compromiso que no sólo toca a los partidos políticos sino a toda la sociedad en su conjunto.
El pueblo dominicano abre hoy un nuevo capítulo de su historia democrática, cargado de esperanzas y sueños, comprometido con la preservación y ampliación de la democracia y dispuesto a desplegar todas sus energías para llevar a cabo las transformaciones que requiere nuestra nación.
Aspiramos a que los funcionarios que tengan la oportunidad de acompañar al Presidente en la ejecución de estas tareas sean fieles en el cumplimiento de su visión sobre las aspiraciones del pueblo de que sus servidores públicos muestren un mayor compromiso con sus obligaciones, sean más abiertos y asequibles y estén más dispuestos a trabajar de la mano con los actores sociales vinculados.
Esta visión de nación podrá ser llevada a cabo en la medida de que seamos capaces no sólo de compartirla sino de aunar esfuerzos y vencer los obstáculos para hacerla realidad.
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