Los Departamentos de Gestión Ambiental y Residuos Sólidos de la Secretaria de Estado de Medio Ambiente, disponen por resolución que el vertedero de esta población no puede seguir operando, alegando que el mismo no posee un permiso de la institución y haber ocasionado daños ambientales.
El cierre será por tiempo indefinido, hasta tanto las autoridades municipales de Hato Mayor no se presenten ante la Secretaria de Medio Ambientes y Recursos Naturales con una solución al problema, que está preocupando a autoridades y residentes de la comunidad de El Manchado, expuestos a contraer enfermedades de incalculables consecuencias.
Participaron en la clausura del basural o vertedero, Ana Hernández y Delly Méndez, del Departamento de Gestión Ambienta de la Secretaría de Medio Ambiente.
Mediante una resolución, la institución de medio ambiente, revela que el cabildo de Hato Mayor ha estado desoyendo la petición de esa cartera para que reubique el vertedero en otro lugar, debido a que no existen las más mínimas condiciones para que opere en el lugar donde se encuentra.
El vertedero está ubicado en la comunidad de El Machado, a unos 7 kilómetros de al norte de Hato Mayor, justamente donde nace el río Maguá y cruza, manantiales, norias y riachuelos.
Expresa el documento, entregado a los medios de comunicación, que el ayuntamiento de Hato Mayor tiene más de 5 años violando los artículos 41 y 107 de la Ley 64-00, sobre protección y medio ambiente en la República Dominicana.
Desde el 20 de abril del 2005, fecha en que fue instalado el nuevo vertedero municipal de Hato Mayor, las enfermedades como fiebre tifoidea, parasitarias, de la piel y el surgimiento de plagas de ratones, moscas, mosquitos, culebras no dejan de afectar e intranquilizar a los habitantes de las comunidades Guamira, Kilómetro 7, Kilómetro 9 y El Manchado, al norte de esta ciudad.
Unas 300 familias viven más en las puertas de clínicas y hospitales, buscando restablecer su salud, que en sus casas, debido a la gran cantidad de moscas, que no deja ni comer ni mantener la comunicación verbal.
En el vertedero, la Sala Capitular autorizó la crianza de cerdos por diez años bajo contrato al ex-síndico Isidro de Jesús Ramírez, cuya carne se vende en carnicerías de la ciudad y San Pedro de Macorís.
Numerosas cerdas madres con más de 200 marranitos, que se crían buceándos en el vertedero, al cual ya no pueden penetrar los camiones del cabildo.
Las autoridades de Salud Pública en la provincia tenían conocimiento de la crianza de cerdos en el vertedero y lo que eso implica para la salud de los consumidores de carne, pero se hicieron de la vista gorda ante el problema.
Decenas de personas, incluidas familias completas hacen el trabajo de buzos en el depósito de basura, exponiéndose a la contaminación y el contagio de enfermedades de todos tipos.
Margarita Cedeño de Fernández, esposa del presidente Leonel Fernández, se había referido al problema del vertedero de Hato Mayor, exigiendo que esa contaminación no puede estar cerca de una zona habitadas por seres humanos, pero nada se había hecho.
En principio, cuando fue abierto el lanzamientos de los desperdicios eran tapados con material de relleno por el síndico Reynato Cruz Tineo, pero que al asumir el actuar ejecutivo municipal, Amado de la Cruz, la práctica fue descontinuada, aumentando la contaminación ambiental en la zona.
Aparte de eso, el vertedero fue aperturado justamente en la falda de la loma de El Manchado, donde nace el río Maguá, cuyas aguas están altamente contaminadas por la alta toxicidad que cae a su cauce por la descomposición de la basura.
La contaminación que arrastra la basura, también está afectando ramales de agua que salen de dos norias grandes, que brotan de las montañas de la comunidad de El Manchado y de la cuales se abastecen los lugareños.
El vertedero es tomado en horas nocturnas por los gatuneros de la zona, vendedores de carne de contrabando, que abandonan las osamentas y pieles y cargan con los filetes, que venden en hoteles y mercados de la región Este.
“Mire ahí, ya los camiones no pueden acceder al vertedero a depositar la basura, es un desorden que nos está trayendo enfermedades y plagas en toda esta zona, dijo Dominga Ruiz, presidenta de la Junta de Vecinos “La Unión” de la comunidad de Guamira, donde está el vertedero.
En la zona se han presentado varios casos de tuberculosis han sido detectados en la zona, después que fue instalado el depósito de basura en la zona.
Fulgencio Santana, de la Asociación de Caficultores de Guamira, dijo que la presencia de plagas como moscas, mosquitos, cucarachas y otros insectos, está afectando las plantaciones agrícolas de la zona.
Eddy Montilla Mora (Maja Block), dirigente comunitario aseguró que diariamente viajan a los médicos tres y cinco niños, afectado de fiebre, vómito y diarrea, porque están consumiendo alimentos contaminados por las moscas, que no dejan comer tranquilo a nadie.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario